Tras completar una carrera universitaria, en muchas ocasiones surge el siguiente dilema: ¿debería buscar un trabajo o mejorar mi formación estudiando un Máster? Quienes ya cuentan con un puesto de trabajo también se plantean si estudiar un Máster si es conveniente estudiar un Máster puede facilitar un ascenso o, incluso, abrir oportunidades para cambiar de sector laboral.
Es cierto que tomar la decisión de estudiar un Máster no es sencilla y debe ser meditada cuidadosamente. Y más aún si se trata de estudiar un Máster MBA o Master en Dirección de Empresa, por la dedicación y rigurosidad que exige esta formación impartida en las Escuelas de Negocios más prestigiosas.
Sin embargo, considerando cómo evolucionan las empresas y las exigencias de los puestos de trabajo, el conocimiento que hemos adquirido en el pasado tiene una vida útil cada vez más corta.
No cabe duda de que estudiar un Máster en España amplia conocimientos y habilidades, y hasta puede transformar radicalmente una trayectoria profesional al lograr una especialización en áreas con alta demanda de profesionales.
Datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que, aunque la mayoría de los estudiantes de máster tienen entre 23 y 30 años, el porcentaje de estudiantes mayores de 30 años está creciendo, representando ya 25% del total de estudiantes de posgrado, cifra que continúa creciendo. También es interesante que entre 2022-2023, se impartieron más de 4.000 programas de máster en España. Estos datos muestran que, cada vez más personas tienen interés y deciden estudiar un máster.
A continuación, te explicamos las razones principales por las cuales es una buena idea estudiar un Máster.
Razón 1: Muchos puestos de trabajo requieren un Máster
En numerosos campos profesionales, un título de máster es un requisito indispensable para acceder a determinadas posiciones laborales. Esto es particularmente evidente en las carreras de ingeniería y ciencias, donde la complejidad y la especialización de las tareas requieren un nivel avanzado de conocimientos que solo un posgrado puede proporcionar.
Además, en el ámbito de la educación, la abogacía, la arquitectura y algunos empleos en el sector público en España, es un requisito sine qua non poseer un título de posgrado para ejercer la profesión.
Por otro lado, estar formado a través de un máster incrementa las probabilidades de ser contratado y posiciona a una persona como un experto en el campo, otorgado una ventaja competitiva en el mercado laboral. Además, el título es un reconocimiento de experticia que valida las capacidades ante futuros empleadores o en el momento de postular para un ascenso laboral.
Razón 2: Un Máster es obligatorio para desarrollar una carrera científica
Los aspirantes a desarrollar una carrera en la investigación o en el ámbito académico, un título de máster es fundamental. Los licenciados universitarios con un máster pueden optar por continuar sus estudios hacia un doctorado, y aunque las universidades tienen autonomía para decidir sobre las admisiones, los titulados de máster suelen tener un camino más directo.
Quienes desean desarrollar una carrera como científico, un título de Máster suele liberar de la superar pruebas adicionales, permitiendo que el estudiante se concentre en la investigación y otros estudios avanzados desde el inicio. Además, poseer una titulación de posgrado oficial facilita la transición hacia estudios doctorado al cumplir con los requisitos formales exigidos por las universidades.
En este punto, es importante diferenciar entre un máster oficial y uno propio, ya que cada uno tiene características y reconocimientos distintos, lo cual puede influir en el acceso a ciertos estudios doctorales y oportunidades profesionales. De forma breve, el máster oficial está acreditado por el EES y la administración pública, está reconocido internacionalmente y permite el acceso directo al doctorado. En cambio, un título de máster propio, aunque especializado y valorado por empresas, está más enfocado hacia el desarrollo profesional en empresas de sector privado.
Razón 3: Experiencia práctica y especialización en campos emergentes
Además de profundizar en conocimientos teóricos, un máster ofrece la oportunidad de adquirir experiencia práctica en campos profesionales emergentes o especializados. Durante la etapa universitaria, es común que surjan nuevas preferencias y aspiraciones; un máster permite explorar estas áreas con más intensidad y de forma más práctica.
En España, el aumento en la oferta de masters, con más de 4.000 programas disponibles durante el curso 2022-2023, refleja una respuesta directa a la demanda de habilidades prácticas y especializadas que los empleadores buscan. Este crecimiento en la oferta de programas de máster proporciona a los estudiantes la flexibilidad para personalizar su educación según sus intereses y objetivos de carrera, además de adquirir una especialización en campos emergentes, lo que fortalece sus perfiles de cara al mercado laboral.
Además, haber estudiado un máster refleja a los futuros empleadores el compromiso del candidato a un puesto con el aprendizaje continuo y su capacidad para superar desafíos complejos, habilidades altamente valoradas en cualquier entorno profesional.
Razón 4: Mejor ahora que después
La decisión de cuándo cursar un máster no debe postergase demasiado, argumentan la mayoría de los expertos en desarrollo profesional. ¿Es mejor trabajar y luego volver a estudiar, o continuar directamente con un máster tras terminar la etapa universitaria? Ambas opciones pueden ser válidas.
Aquellos que deciden volver a estudiar tras un período en el mundo laboral, completar un máster permite mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías.
Los recién titulados universitarios que aún no han incursionado en el mercado de trabajo, estudiar un master ofrece la ventaja de obtener una formación especializada en un momento donde aún no se han establecido compromisos profesionales, lo cual permite sacar mayor provecho a los estudios.
Razón 5: Poder asumir posiciones de liderazgo
Obtener un máster, y en particular un título MBA (Master of Business Administration), incrementa los conocimientos y habilidades que facilitan un acceso más rápido a puestos de liderazgo o directivos. Los empleadores frecuentemente reconocen el valor adicional que aporta un graduado de máster, especialmente en áreas de gestión y dirección. Es común que, en las grandes empresas, los titulados de máster, particularmente los de MBA accedan directamente al desempeño de funciones de alta responsabilidad.
Además, los titulados de máster suelen recibir un salario más alto en comparación con los graduados que solo cuentan con una licenciatura.
Lee: cómo es el ROI de un MBA y descubre lo que sígnica y cómo valorarlo.
Razón 6: Profundizar en un ámbito de conocimiento
La naturaleza compleja de muchas disciplinas modernas requiere un estudio más detallado y especializado, que solo es posible en un programa de posgrado. Los tres o cuatro semestres de formación que suele durar un máster, permiten un aprendizaje intensivo en áreas específicas, además de la personalización del perfil académico y profesional del estudiante.
La formación intensiva que ofrece un máster permite afrontar los retos de un área profesional con mayor seguridad y habilidad. Además, dota al estudiante con las competencias necesarias, así como de las habilidades duras o hard skills, para liderar e impulsar cambios en sectores especializados, donde contar con un conocimiento profundo y actualizado es fundamental para alcanzar el éxito.
Razón 7: Descubre y desarrolla tu potencial
Más allá de las cualificaciones técnicas y profesionales, un máster proporciona un espacio esencial para el autoconocimiento. A lo largo del programa, mediante estudios intensivos, experiencias en el extranjero, trabajos a tiempo parcial o prácticas, se abre una oportunidad para perfeccionar intereses y habilidades blandas o personales.
El proceso no solo contribuye a afinar el perfil profesional, sino que también facilita una reflexión profunda sobre metas y aspiraciones de carrera. Estudiar un máster ofrece un valioso periodo para explorar y definir un camino profesional, asegurando que las decisiones estén bien informadas y alineadas con los objetivos personales y profesionales.