Detrás de una empresa exitosa, está la influencia de la visión y la misión, tanto en la propia organización como en las personas que trabajan en ella.
En este artículo, explicamos qué es la misión, visión y valores de una empresa, y el papel que desempeñan en la creación de valor para los clientes. Además, proporcionamos una guía para ayudarte a definir estos conceptos empresariales clave.
La misión de una empresa: significado, importancia y cómo definirla
¿Qué es la misión de una empresa?
La misión de una empresa es su propósito fundamental. Define el tipo de cliente al que se dirige, los productos que ofrece, los servicios que presta y la manera en que lo hace. En esencia, explica qué aspira la empresa a lograr en el presente, es decir, define la razón de su existencia.
La misión de una empresa debe responder a preguntas como las siguientes:
- ¿En qué actividad se especializa la empresa?
- ¿Qué problema resuelve el producto o servicio?
- ¿Qué motivó la creación de la empresa?
- ¿Cuál es el valor añadido de los productos o servicios?
- ¿Por qué los clientes deberían elegir lo que ofrece la empresa?
- ¿Qué hace única a la empresa frente a los competidores?
¿Por qué es importante definir la misión corporativa?
Tener una misión bien definida es crucial, ya que actúa como guía de la gestión estratégica de la empresa y de cada una de las acciones. Por tanto, la importancia de la misión de una empresa reside en que permite entender:
- El propósito de la presencia de la empresa en el mercado.
- A quién se pretende servir y cómo.
- Los desafíos que la empresa está dispuesta a enfrentar.
La ausencia de una misión empresarial puede llevar a una desconexión en la motivación de los empleados, confusión entre los clientes sobre la propuesta de valor de la empresa, incertidumbre entre los inversores y, en última instancia, dificultades en la gestión de las relaciones públicas y comerciales.
¿Cómo definir la misión empresarial?
Definir la misión de una empresa requiere llevar a cabo un análisis que contemple los siguientes aspectos:
- Comprender el negocio: evaluar el sector y la posición de la empresa dentro de éste.
- Objetivos futuros: determinar las metas a largo plazo que la empresa aspira a alcanzar.
- Tamaño y capacidad: considerar cómo el tamaño de la empresa influye en su capacidad operativa y de crecimiento.
- Situación actuar: revisar la posición actual de la empresa en su trayectoria de desarrollo.
- Tendencias del mercado: analizar las tendencias actuales y cómo estas podrían impactar la empresa.
- Retroalimentación de Stakeholders: incluir opiniones y experiencias de clientes, proveedores y otros actores clave.
En definitiva, las preguntas esenciales que deben responderse al formular la misión de una empresa son:
- ¿Por qué existe la empresa?
- ¿Qué valor ofrece a los clientes?
- ¿Qué aspiraciones tiene para el futuro?
- ¿Qué identidad desea proyectar?
- ¿Cuáles son los principios fundamentales que la guían?
- ¿Qué desafíos está dispuesta a enfrentar?
- ¿Cómo se diferencia de los competidores?
- ¿Cuál es el propósito más allá de la generación de ingresos?
Ejemplos de Misión de una empresa
Una manera efectiva de redactar una declaración de misión es a través de la fórmula simplificada: «Nuestra empresa ayuda a [cliente objetivo] a alcanzar [objetivo específico] mediante [método único]». Esta estructura indica claramente a quién se sirve y qué se logra, y cómo se diferencia la empresa en el mercado.
Empresas como Facebook, Tesla, y Google, han articulado misiones que definen claramente su negocio, impactan en los clientes y motivan a los equipos que las integran.
Ejemplos de misiones empresariales son:
- Facebook se esfuerza por conectar a las personas y hacer el mundo más abierto y conectado.
- Tesla se dedica a acelerar la adopción de transporte sostenible con coches eléctricos atractivos y accesibles.
- Sony busca satisfacer y despertar la curiosidad de sus clientes.
- Google se compromete a organizar la información mundial para que sea accesible y útil para todos.
- Microsoft desea empoderar a individuos y empresas para que alcancen su máximo potencial.
- Coca Cola quiere refrescar el mundo e inspirar momentos de optimismo y felicidad.
- La ONU mantiene su enfoque en la paz y seguridad internacionales.
- Cruz Roja se dedica a aliviar el sufrimiento humano en emergencias, con la ayuda de voluntarios y donantes.
- L’Oreal se compromete a ofrecer innovación cosmética de alta calidad y seguridad para todos.
La visión de una empresa: significado, importancia y cómo definirla
¿Qué es la visión de una empresa?
La visión corporativa es la meta a largo plazo hacia la que aspira llegar una empresa. Es decir, representa lo que la organización aspira a convertirse en el futuro. Funciona como una brújula que orienta las estrategias y decisiones.
La declaración de visión es más que una descripción de las operaciones actuales; es una proyección ambiciosa que define cómo queremos que un negocio evolucione y crezca en el largo plazo, como por ejemplo en los próximos cinco años.
Una visión debe clarificar aspectos fundamentales sobre el futuro de la empresa, como:
- Futuro deseado: ¿Cómo se visualiza la empresa en el futuro? ¿Qué forma y tamaño tendrá?
- Diferenciación a largo plazo: ¿Cómo se distinguirá la empresa de sus competidores en 5, 10 o 20 años?
- Estrategias y acciones: ¿Qué acciones concretas se emprenderán para alcanzar esta visión?
- Recursos necesarios: ¿Qué recursos, tanto humanos como materiales, serán esenciales para alcanzar estos objetivos?
- Valor agregado: ¿Qué valor único ofrecerá la empresa cuando alcance su máximo desarrollo?
Llegados a este punto vamos a reforzar la comprensión de la misión y visión corporativa. Par ello, veamos cuál es la diferencia entre la misión y la visión de una empresa:
- Misión: se centra en el presente, delineando el propósito fundamental de la empresa y cómo esta pretende operar diariamente en su mercado y comunidad. Responde a preguntas como las siguientes: ¿por qué existe la empresa? y ¿Cuál es su papel principal en el mercado y la sociedad?
- Visión: se proyecta hacia el futuro, describiendo lo que la empresa aspira a ser y cómo se imagina su estado ideal a largo plazo. La declaración de visión de una empresa debe responder las siguientes cuestiones: ¿Cómo será la empresa en el futuro? ¿Qué cambios se anticipan para seguir siendo relevante? ¿Cuáles son las metas a largo plazo?
¿Por qué es importante definir la visión de una empresa?
Definir la visión de una empresa es fundamental porque actúa como una hoja de ruta para el futuro del negocio. La visión es una declaración poderosa que define lo que la empresa aspira a convertirse.
Para los directivos, tener una visión clara facilita enormemente la gestión de la empresa. Si no existe una visión definida, básicamente no se sabe lo siguientes aspectos:
- ¿Cuáles son los principales objetivos a lograr?
- ¿Cómo quiere impactar o cambiar el mundo la empresa?
- ¿Cómo debería actuar para lograr estos cambios?
- ¿Qué decisiones y direcciones es necesario tomar para cumplir las metas?
En la práctica, sin una visión, la empresa se encontrará operando sin metas claras ni una dirección definida, navegando el día a día sin un plan estratégico. Por el contrario, una visión empresarial proporciona un camino claro hacia el éxito, permitiendo alcanzar los objetivos estratégicos que se alinean con la misión de la empresa.
¿Cómo definir la visión?
Para desarrollar una visión impactante y duradera, considera los siguientes pasos:
1. Futuro de la empresa: imagina cómo quieres que sea la empresa en 5, 10, o 20 años. ¿Qué posición deseas que ocupe en el mercado? ¿Cómo deseas que sea percibida?
2. Diferenciación futura: reflexiona sobre cómo la empresa evolucionará para distinguirse de la competencia. ¿Qué innovaciones o cambios planeas implementar?
3. Estrategias: define las estrategias clave que permitirán hacer realidad esa visión. ¿Qué pasos concretos necesitas tomar?
4. Recursos necesarios: identifica los recursos que serán esenciales para lograr tus metas. Esto incluye talento humano, tecnología, capital y otros recursos clave.
5. Valor añadido: considera el valor que tu empresa aportará una vez que alcance su «estado ideal». ¿Cómo mejorará la vida de los clientes o el entorno en general?
Ejemplos de visión de una empresa
Algunos ejemplos de declaraciones de visión de empresas o insticiones reconocidas son:
- Microsoft: un ordenador en cada escritorio y en cada hogar.
- LinkedIn: crear oportunidades económicas para cada miembro de la fuerza laboral global.
- Facebook: conectarte con amigos y el mundo que te rodea en Facebook.
- Amazon: ser la empresa más centrada en el cliente del mundo.
- IKEA: crear una vida cotidiana mejor para el mayor número de personas posible.
- McDonald’s: ser la mejor experiencia de restaurante de servicio rápido del mundo.
- IESE Business School: ser la escuela de negocios referente a nivel mundial, formando líderes con una mentalidad abierta y comprometida con el impacto positivo.
Valores corporativos: significado, importancia y cómo establecerlos
Los valores corporativos son los principios fundamentales que guían el comportamiento y las operaciones de una empresa. Una vez que se han establecido la misión y visión, el siguiente paso es definir los valores empresariales.
¿Qué son los valores de una empresa?
Los valores corporativos son un conjunto de normas, principios y creencias que determinan cómo se comporta la organización internamente y hacia el exterior. Actúan como un marco ético que diferencia las decisiones correctas de las incorrectas y aseguran que las acciones de la empresa estén alineadas con las creencias fundamentales. Estos valores son escogidos y seguidos por las personas dentro de la organización y son esenciales para mantener la integridad y la coherencia en todas las actividades de la empresa.
Los valores de una empresa deben ser:
1. Relevantes: deben alinearse con la misión y visión de la empresa, reflejando las prioridades y la cultura corporativa.
2. Inspiradores: Deberían motivar y guiar a los empleados hacia un comportamiento coherente con los objetivos de la empresa.
3. Claros: lo ideal es que sean fáciles de entender y comunicar para asegurar que todos en la organización puedan seguirlos y aplicarlos.
4. Consistentes: deben ser aplicables en todas las áreas y decisiones de la empresa, y al mismo tiempo que ayuden a mantener la coherencia en todas las situaciones y a lo largo del tiempo.
¿Por qué es importante definir los valores corporativos?
Definir valores corporativos es crucial para cualquier empresa, y estos beneficios clave demuestran por qué:
1. Claridad en la toma de decisiones: los valores proporcionan un marco de referencia que ayuda a la empresa a mantenerse enfocada en sus objetivos, facilitando decisiones coherentes con su misión y visión.
2. Dirección futura: los valores son la base sobre la cual se construye la visión a largo plazo de la empresa, ayudan en la elaboración de cada plan estratégico y también, facilitan a que nuevos proyectos dar prioridad.
3. Alineación estratégica: aseguran que las acciones diarias y la estrategia global de la empresa estén en consonancia, optimizando el rendimiento y la eficiencia operativa.
4. Fortalecimiento de la cultura organizacional: crean un ambiente laboral positivo donde los empleados se sienten parte de algo mayor y están motivados a contribuir al éxito de la empresa.
5. Mejora de la reputación: una empresa que actúa de acuerdo con sus valores es vista como confiable y ética, lo que atrae a clientes, inversores y nuevos talentos que valoran estos principios.
6. Resiliencia organizacional: en tiempos de crisis, los valores corporativos actúan como un ancla, manteniendo a la empresa centrada y unificada para superar los retos y adaptarse a los cambios.
¿Cómo definir los valores de una empresa?
Para definir los valores corporativos, es útil realizar un ejercicio de introspección y cuestionar las creencias y principios fundamentales de la empresa. A continuación, tienes las preguntas cuya respuestas facilitarán este proceso de definir los valores de una empresa:
1. Identificación de creencias fundamentales: determina qué principios son esenciales para la identidad de tu empresa y cómo estos guían su comportamiento.
2. Cultura deseada: define el tipo de ambiente laboral y las actitudes que deseas fomentar dentro de la organización.
3. Definición de límites: delimita qué comportamientos o prácticas son inaceptables y qué acciones son prioritarias para la empresa.
4. Evaluación de escenarios hipotéticos: considera cómo debería responder la empresa ante situaciones específicas para asegurar que los valores se mantengan consistentes en la práctica.
5. Protocolos de conducta: establece cómo se manejarán situaciones delicadas como la discriminación o controversias.
6. Concesiones y posicionamientos: decide qué concesiones son inaceptables y en qué temas la empresa tomará una postura firme, reflejando sus valores en decisiones públicas.
En última instancia, definir claramente la misión, la visión y los valores de una empresa es fundamental para alcanzar los objetivos comerciales y desarrollar una marca distintiva que diferencie de la competencia.
Además, las declaraciones de visión y misión de una empresa ayudan a estandarizar las prácticas comerciales, asegurando que todo el equipo trabaje cohesivamente y mantenga un rumbo común.
